Muchas personas tienen préstamos. Los prestatarios los piden a menudo y esperan poder devolver la deuda. Pero esto no siempre funciona: pueden surgir problemas. ¿Qué hacer si el préstamo es necesario? Y no es posible rechazarlo. La situación no es tan difícil, hay escenarios que le ayudarán. Así que usted puede tomar un préstamo y no tener miedo de las consecuencias negativas que no le permitirá pagar la deuda. Por ejemplo, enfermedad e incapacidad prolongadas, reducción de ingresos o despido.
Debido a la pérdida del empleo, puede quedarse temporalmente sin dinero. La situación es más complicada si tiene un préstamo. Averigüemos qué hacer en esta situación.
Qué hacer con un crédito cuando no se tiene trabajo
Hay varias opciones para resolver el tema del crédito cuando no se tiene trabajo ni otras fuentes de ingresos. Veamos cada una de ellas.
Utilizar un seguro
Los bancos suelen ofrecer la posibilidad de contratar un seguro de desempleo con el préstamo. Si lo has pagado, puedes utilizarlo. Para ello, tienes que ponerte en contacto con el servicio de atención al cliente del banco.
Cada compañía de seguros o bancos determina por sí mismo las situaciones en las que se abona una prestación. Por lo general, un evento asegurado es la pérdida del puesto de trabajo en los siguientes casos:
- despido
- cierre de la organización
- despido debido a un cambio de propiedad
- despido en una situación ajena a la voluntad del empresario o del trabajador. Por ejemplo: una empleada ha sido despedida por servicio obligatorio o una empleada anterior se ha reincorporado tras un permiso de maternidad. En otras palabras, si renuncia por voluntad propia o si es despedido por falta disciplinaria, no podrá utilizar el seguro.
Solicitar al banco una reestructuración
Los bancos pueden renegociar las condiciones de un contrato para facilitarte los pagos: es la reestructuración. Sólo se concede en situaciones difíciles de la vida que puedas demostrar con documentos. Esto incluye la pérdida del empleo. Si el banco aprueba la reestructuración, el plazo de tu préstamo se ampliará y tus pagos serán más bajos. Pero en este caso, el pago en exceso aumentará.
La reestructuración también se refleja en tu historial crediticio. Sin embargo, a la hora de considerar las solicitudes, los bancos siguen percibiéndola mejor que los pagos atrasados..
Declararse en quiebra
La quiebra es la opción más extrema cuando no encuentras trabajo durante mucho tiempo. Es el caso cuando no hay otras opciones para pagar tus deudas: no puedes vender tus propiedades ni pedir dinero prestado a conocidos.
La quiebra limitará sus viajes, futuros préstamos y actividades de gestión. Si es posible, hay que evitar la quiebra.
Tómese unas vacaciones crediticias
Unas vacaciones crediticias son un periodo de gracia durante el cual puede optar por no devolver su préstamo. Las vacaciones se conceden por un periodo de 1 a 6 meses. Las condiciones están prescritas por ley y son las mismas en todos los bancos. El tipo de interés del préstamo no cambia, pero el plazo aumenta. Lo que no haya pagado durante las vacaciones deberá pagarlo después. Para solicitar las vacaciones, hay que dirigirse al banco con documentos que confirmen una reducción o pérdida de ingresos.